Dan Brown, el escritor con menos imaginación
de los últimos tiempos vuelve a la carga con INFERNO. Digo escritor porque enlaza unas palabras con otras y el cúmulo de esas palabras trae como resultado frases que acaban llenando páginas, es algo inexorablemente irremediable, por desgracia. Dan Brown se apropia de investigaciones y literatura ya existente para sus obras. En el Código Da
Vinci cogío lo que muchos sabiamos sobre María Magdalena (eché de menos al Abad Saunière de Rennes-le-Château) y a partir de
ahí se inventó una novela con 4 muertes y un par de curas
chalaos, qué gran logro. En 'El Símbolo Perdido' nos mostraba una
novela forzada con un asesino soporifero lleno de tatuajes y sin ninguna
gracia a lo 'El Dragón Rojo' de Hannibal Lecter (confieso que acabé
pasando los capítulos del asesino, porque realmente es un tío muy muy
aburrido), para al final del libro hacer una simple reflexión sobre las
repercusiones físicas del pensamiento colectivo, se te queda esta cara
O.o. Y ahora nos trae una novela inspirada en la primera de las tres
cánticas de La Divina Comedia de Dante, El Infierno, como ya han hecho
antes muchos poetas y escritores desde hace cientos de años. Resumen, no
trae nada nuevo, ni ideas nuevas, escribe refritos a partir de
literatura ya inventada. A ver cuantos millones de libros vende con
esta, con la primera fueron 80 millones, con la segunda 30. Que vendan
sus novelas con adjetivos como 'maestría' e 'ingenio', siento la
expresión pero es para partirse el culo. Además han tenido a los
traductores encerrados dos meses en un bunker con guardas, es que es no
hay nada como el morbo para un buen marqueting de ventas.
Según parece Dan Brown estuvo estudiando en mi ciudad cuando era joven. No logramos convencerlo de que si seguía su vocación de odontólogo haría mucho menos daño.
ResponderEliminarSu arte es inimitable. Supongo que ya conoces esta página:
http://probar.blogspot.com.es/